viernes, 28 de agosto de 2009

Ni se crea ni se destruye, se transforma

La viveza de las telas, la variedad de ritmos, la venta de niños, el olor del mercado,la avidez de los mosquitos, la naturalidad de los zumos, la cantidad de etnias, la piña y el mango, los rituales de iniciación, los salesianos, la convivencia de lenguas, la pate con salsa, las actividades participativas, el desorbitado precio de las importaciones, el bajo precio de la mano de obra, la tradición oral, los niños que piden regalos, las ongs en cada esquina,las playas desiertas, las calles de tierra, las familias desarraigas, la agresividad infantil, el sincretismo religioso, la limpieza a las 5 de la mañana, la humedad, el ébano, las risas,la cantidad de niños,las enérgicas danzas,la poligamia, los coches "cero emisiones", la formación profesional, el sistema gremial,los cortes del suministro eléctrico, el internet a 512Kb, la inexistencia de pañales, las clases de inglés,los cascos invisibles,las moto-taxi también llamadas kekenos, los musulmanes, el concepto de riesgo, la búsqueda de identidad, los médicos que lo curan todo, el orden en el caos circulatorio,los cristianos celestes, la intensidad del arte africano, las peleas de los niños, los secretos y el vodoo,los reyes de los poblados, la gasolina en botellas de cristal, la escolarización, las casas sobre las aguas, los abrazos de los niños, loshoteles para blancos, todo por hacer, la agilidad de los hombres, gri-gris, los tocados de las señoras, el dinero y el blanco, el blanco y el dinero, el colonialismo, los orígenes de la esclavitud,la madera de teca...

Resulta difícil entender esta realidad, este lío de ideas que se pasean tranquilamente por mi cabeza, aunque en algún momento me parece discernir que en el fondo, son diferentes formas de buscar una misma cosa.

jueves, 20 de agosto de 2009

De viaje por Benín

Antes de venir a Benín, estuve buscando alguna guía de viaje para tener un poco de información general y útil para el viaje. Me recorrí varias librerías habituales y por no haber, ni siquiera había una de África Occidental, de estas que hablan de varios países en un mismo libro. Ya empezaba a darme por vencido hasta que un librero me dijo que fuese a la Plaza de la Cruz, que allí estaba Muga, una librería especializada en viajes y montaña, y fue allí donde encontré una guía, eso sí, en inglés, así como de tipo profesional.

Y sin embargo, a pesar de esta escasez de información sobre Benín hay que decir que hay muchísimas cosas interesantes para visitar. En estas semanas he tenido la suerte de coincidir con gente de Santander, Asturias, Toledo, País Vasco, Burgos, Huelva y Extremadura y hemos hecho algún que otro viajecillo. No todo va a ser trabajar y trabajar...

Por un lado está Cotonú, que es la ciudad más grande del país, hay un tráfico terrible y mucha contaminación por la gasolina sin refinar, no os podéis imaginar la cantidad de motos que circulan en cualquier dirección siguiendo un orden desordenado.
El mercado de Danktopá es impresionante y visitarlo es una experiencia increiblemente peculiar.

Porto Novo es la capital, y donde nosotros vivimos, es una ciudad más tranquila y en la que yo me encuentro más tranquilo. Hay menos de todo que en Cotonú pero a mí me gusta más. El otro día fuimos a dar un paseo por la Asamblea Nacional y al Jardín Botánico, que aunque está un pelín descuidado está muy bien.

Una visita obligada si algún día os decidís a venir a Benín es Ouidah. Esta ciudad de tamaño medio ha sido el escenario de uno de los episodios más oscuros de la historia mundial: la esclavitud.

Ouidah, por tener el mejor puerto natural de la costa occidental africana, se convirtió en un enclave estratégico en el comercio de esclavos. Cuando la mano de obra empezó a ser muy demandada para trabajar las tierras de Norteamérica, comenzaron a arribar barcos a las costas beninesas. En principio para llevar a cabo acciones de comercio habituales, pero más adelante para "intercambi
ar" objetos por esclavos.

Los esclavos solían ser reclutados por los propios reyes africanos (para conseguir riqueza, pero también para evitar que ellos mismos fueron capturados), subastados en la plaza de Ouidah y arrastrados a la playa, donde les esperaba el barco. Éste mismo recorrido, desde la plaza a la playa, pasando por diferentes esculturas, el lugar donde se encontraba el Árbol del Olvido, y terminando en la Puerta del No Retorno es el que hicimos hace una semana, muy recomendable.

Otra visita interesante es Gran Popó, un poco más allá de Ouidah saliendo desde Cotonú. Gran Popó es una zona de una riqueza natural impresionante, un lago tranquilo, manglares, cocoteros, piraguas de madera y mucho silencio. También está una de las playas más conocidas de Benín, muy amplia y espectacular pero con unas aguas que mandan donde quieren en cualquier momento.A partir de ahora será más difícil que haga viajes de este tipo porque ya estamos poquitos por aquí, pero ya hay alguna idea en el aire. Os iré contando para ver si os animáis a conocer Benín. Merece la pena.


sábado, 15 de agosto de 2009

Un día cualquiera

Suena el despertador, me hago el remolón. Vuelve a sonar, son las 7:27h, me levanto y me doy una ducha con agua "del tiempo", o sea fría. A los ecologistas, si queréis ahorrar agua, nada como el agua fría. Me asomo a la terraza, siempre amanece nublado pero a lo largo del día se anima.

Un buen desayuno, aunque con leche en polvo porque la normal es carísima, y a preparar actividades para los chavales. Las actividades las preparamos Valle, una chica extremeña que controla de animación sociocultural, y yo,aunque en honor a la verdad, es ella la que más ideas propone. Sobre las 11:00 empezamos las actividades en el Foyer Don Bosco, que es un edificio a unos 5 ó 10 minutos en moto de mi "casa", el Centro Magone.

En el Foyer trabajamos directamente con los chavales que están acostumbrados a vivir en la calle y que vienen normalmente del mercado de Cotonú. En el mercado de Danktopá, que así se llama, hay monitores y una caseta para hacer de alfabetización y algún juego, los monitores dan paseos por el mercado hablando con los chavales y comentándoles que si quieren pueden pasar por la caseta para estudiar un poco, dormir, o comer algo.

Si empiezan a interesarse pueden ir a Porto Novo por sus propios medios y se les acoge en el Foyer.Las actividades que hacemos son tipo manualidades, teatrillos, juegos... Los niños suelen estar desencantados y a veces son bastante cerriles, se suelen pelear bastante y si se enfadan ya no miran a nadie a la cara en 2 horas, pero en cuanto empiezan a pintar,recortar, les dices 4 veces Bon travail (Buen trabajo), y les sonríes otras 4,se animan, se lo pasan muy bien y te cogen de la mano y te abrazan tremendamente contentos. Son niños con mucha falta de cariño pero con muchas ganas de darlo y recibirlo.A veces se dan situaciones muy simpáticas pero otras no lo son tanto.

Alguna mañana, cuando saco algo de tiempo miro unos temillas de unos talleres y un poquillo sobre los consumos de agua y electricidad del centro,a ver si podemos ahorrar un poquillo y poner algunas cosas en orden, aunque esto es más bien secundario.

Cuando terminamos los juegos nos vamos a comer al Centro Magone, donde van los chavales ya más estables en cuestión de conductas, hábitos, etc.para empezaron o retomar la escuela o como aprendiz en un taller según sea el caso. Por las tardes apoyo un poco a los monitores con las clases de Física, Matemáticas e Inglés. Y así poco va pasando la tarde, luego un partidillo a fútbol, lavar la ropa o hacer cualquier cosa.
Con el francés me voy apañando, ya no hablo tan a estilo indio y más o menos va bien, la pronunciación es lo más complicado porque aquí, como el francés no es su lengua materna, cada uno tiene su acento y no sé muy bien a quién imitar, pero la gente te entiende porque siempre están dispuestos a adivinar qué narices quieres decir.

Aquí se cena pronto, el sol es el que manda, y anochece temprano, nos bajamos al banco y hablamos un poco sobre lo que surja,algún día vamos a un bar que hacen teatro africano, o leyendo algún libro.






domingo, 9 de agosto de 2009

Dicen que esto engancha

Como la mayoría ya sabéis, el motivo de mi estancia en Benín es la de colaborar como voluntario en un proyecto de una ONG, algo bastante típico cuando uno se va a África para una estancia un pelín larga y está medianamente relacionado con la cooperación internacional, ¿no?.

Bueno, pues el proyecto con el que colaboro trabaja con "Niños de la calle" de Benín, y depende de los Salesianos, que dentro de las diferentes ramas de la iglesia están centrados en la educación y la juventud, concretando un poco más en la formación profesional. La ONG en cuestión es JTM (Jóvenes del Tercer Mundo), que como ahora lo de tercer mundo ya no está muy bien visto, se llama Jóvenes y Desarrollo.

Aquí hay mucha gente trabajando en el proyecto, salesianos, profesores, monitores, psicólogos... la gran mayoría benineses, y también hay voluntarios belgas, alemanes y franceses, aunque la mayoría somos españoles. El ambiente es muy bueno y muchos de ellos han venido varias veces. Dicen que esto engancha.

Hay diferentes motivos por los que un niño puede terminar en la calle, bien porque la familia no tiene dinero para hacerse cargo, por maltrato, porque una madre rechaza a los hijos de otra madre en una sociedad polígama, porque los han vendido como esclavos o incluso por considerarlos responsables de una desgracia ocurrida en la familia (podéis consultar un poco más sobre Vodoo, animismo, etc. Es ampliamente practicado en Benín).

El caso es que aunque nos parezca increíble, duro, extraño o degradante, la realidad es que muchos niños (más que niñas, que desempeñan más las tareas domésticas) deciden abandonar o huir de estas situaciones y se van directitos a la calle. Huelga decir que sin dinero, sin escuela y sin rien de rien.

Para salir adelante es habitual que vayan a los grandes mercados de las ciudades donde pueden sobrevivir haciendo algún que otro trabajillo, comiendo sobras o, si se tercia, robando lo que puedan. Así comienzan una vida en la que se ven sólos y en la que deben aprender a cuidarse por sí mismos antes de haber dejado el último diente al ratoncito Pérez. Por narices se tienen que volver más duros que las piedras.

Cada niño tiene su historia, y aunque lo he intentado, por el momento no he podido conseguir ponerme en la piel de un niño de 7 ó 10 años, que después de haberse cansado de aguantar palizas o explotación, termina en el mercado, comiendo escasamente, intentando dormir en el rincón más seguro que ha podido encontrar.

jueves, 6 de agosto de 2009

Acercándonos a Benin

ara ir entendiendo un poco mejor lo que os cuente de aquí en adelante, y aunque algunos quizás lo conozcáis, os hago una breve introducción a Benin, porque como muchos países de África, es bastante desconocido para la mayoría.

Benín es un país del África negra y francófona, del tamaño de Portugal, con unos 8 millones de habitantes situado en entre Nigeria y Togo que se independizó de Francia en 1960.

Yo vivo en Porto Novo (240.000 hab aprox), que es la capital, aunque la ciudad más grande es Cotonú (800.000 hab) que por estar en la costa y tener un puerto importante para esta zona de África es en la práctica la verdadera capital. Una cosa muy importante, el gobierno es una democracia bastante estable, y como no tienen petróleo, ni diamantes, ni cobre, etc. es un lugar bastante seguro y poco violento. Esta situación facilita que llegue ayuda internacional de diferentes partes del mundo y que en los últimos años, Benin vaya progresando poco a poco.

Aquí, todo es muy diferente al mundo occidental. Ya lo sientes justo al salir del avión; golpe de calor, un ambiente denso, humedad, estás en un país tropical. Parece que me voy acostumbrando pero es muy fácil empezar a sudar en cuanto te mueves. Y ya dentro del aeropuerto, ¡¡ estás en África chaval!!!, todo el mundo es negro, en el aeropuerto hay ventiladores, pero nada de aire acondicionado, la cinta de las maletas está a reventar, la gente se arremolina alrededor gritando para que alguien coja su maleta, uno la coge, se la pasa a otro, y este a otro hasta que llega al propietario. Tardas media hora en coger tu maleta pero ahí la tienes.

Al salir, el tráfico va a su aire, muchísimas motos por todos lados, todo el mundo pita para pedir paso, te adelantan por izquierda y derecha, los semáforos son más bien recomendaciones, y en la rotonda la preferencia la tiene el más fuerte, no se sabe cómo nadie se choca.

En Benín, los olores te atrapan, la tierra, el pescado seco, las especias, y también un olor fuerte, que te deja sin aire, que marea. Me resulta familiar pero no caigo, sí!, Gasolina!! Como os he dicho, Benín no tiene petróleo, pero Nigeria sí, y aquí lo que sí que hay es contrabando de gasolina Nigeriana pero sin refinar.

La venden en cualquier puesto de la calle, en botellas de cristal de varios tamaños como si fuese aceite. Es fácil ver una moto con el conductor y todo lleno de garrafas de gasolina, ése es el distribuidor. Supuestamente esta actividad es ilegal pero la mayoría de las motos y los coches viejos la utilizan. Por eso huele así.

Y ya poco a poco, si continúas paseando, antes de llegar a casa, pronto empiezas a escuchar a los niños decirte Yovó yovó, que significa blanco, y te cantan:


Yovó! yovó!
Bonne soir
Ça va?
Ça va bien, merçi!
Au revoire!

martes, 4 de agosto de 2009

El comienzo de un viaje

Hace ya bastante tiempo que estoy interesado en viajar, conocer diferentes lugares y gentes, enfrentarte a situaciones nuevas y por qué no decirlo, equivocarte cientos de veces en cosas sencillas y cotidianas a las que no damos importancia en nuestra casa pero que en cuanto salimos de nuestro conocido entorno se empiezan a complicar más de lo esperado.

Aunque en realidad, cada vez estoy más convencido de que cuando alguien decide hacer un "viaje", y se podría profundizar mucho sobre lo que es un viaje para cada uno, lo que verdaderamente quiere conocer es a sí mismo.

Y quizás por eso estoy ahora aquí, en Benín, colaborando en un proyecto que trabaja con niños de la calle.

Comienzo este blog para compartir con vosotros mis andanzas y por aquellos que en algún momento me habéis dicho que cuando uno se queda y otro parte, es complicado no saber qué es de la vida del que marcha.

Espero que os guste leer este "cuaderno de notas" y que os animéis a comentar lo que creáis conveniente o preguntar sobre temas que os interese conocer.

Bienvenidos todos.